Por Jadán Pérez

Primeramente, debemos festejar que Colima se abrió a atender las sugerencias del público y logró traer a artistas para todos los gustos después de años y años en los que los empresarios solo traían a referentes del género regional y grupero.

Voltearon a ver a otros horizontes y pudieron venir festivales como el extinto ‘Reventour’ e integrar a una gran variedad de artistas en el Festival del Volcán, y ahora con el Festival La Villa Se Me Antoja que está cumpliendo su sexta edición realizándose en el centro de Villa de Álvarez.

¿Qué sucede con el público Colimense? Sí, obviamente los artistas de género regional son los que siguen abarrotando las plazas, ferias y palenques, incluso se ha visto la necesidad de abrir hasta 2 fechas para darle gusto a los escuchas.

En el año 2019 sucedieron dos hechos en el ya mencionado Festival del Volcán, en la misma edición se desató cierta polémica por el hecho de que María León se lució con una muestra de pool dance en “poca ropa”, esto en el escenario principal ubicado ante miles de personas en el Jardín Libertad.

En esa misma edición pero unos días antes en el Foro Colimita se presentó el DJ Silverio, quien se autonombra “príncipe de las cavernas” con un show un poco “distinto” a lo que la gente está acostumbrada; entre sus actos podemos verlo descambiarse hasta quedar en truza, aventar escupitajos, beber alcohol desde su bota, etc, actuación que los que conocen de qué va su show disfrutaron al 100% mientras que los que no lo conocían lo tacharon de grotesco, inhumano y pornográfico.

El día de ayer le tocó el turno a Sonido Satanás en el Festival La Villa Se Me Antoja, quienes se lucieron en el escenario principal con su set de cumbias muy a su estilo; los de Santa Tere tenían 8 años de no presentarse en tierras colimotas y la última vez lo hicieron en Bare, en un evento totalmente privado donde fuimos los que ya conocíamos su show, dentro de lo presentado ayer por el Sonido Satanás se fomentó el consumo de bebidas alcohólicas con el mismo vocalista bebiendo cerveza y mezcal en pleno show, así como los gritos de frases anti sonantes dedicados a los ‘ex’ y a la gente que les caiga mal, entre éstas frases se escuchó el “Chinguen a su madre”, “Que se vayan alv” entre otros.

Claramente el público no conocedor; en su mayoría personas que rebasan los 40 años, se alejaron del recinto opinando que; “Deberían bajarle al micrófono de ese wey”, “Ya bájenlos”, “Apaguen todo ya”, entre otros.

Quiero finalizar con dos puntos, lo primero es agradecer a los empresarios por traer ese tipo de shows y pararle un poquito a la banda y norteño, en otros Estados ya quisieran tener a cualquiera de estos personajes y más si es gratis como se logró aquí.

Dos; por este motivo, hay artistas locales y nacionales que han tenido que cambiar su Setlist para encajar en cada lugar en el que van y no se desarrollan como quisieran en el escenario con tal de que los vuelvan a contratar, y para mí eso no está chido.

Esperemos a ver lo que sucede en Mayo con Molotov; Pero a esos sí los conocen, ¿No?

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